Una pregunta muy común hoy en día es ¿qué pasará con el e-commerce después de la cuarentena? Pues para muchos negocios, el comercio electrónico pasó de ser un complemento para incrementar las ventas, a una prioridad a raíz del covid-19 y las medidas para prevenir su propagación.

La realidad es que nunca antes, esta modalidad de comercio digital había estado tan presente. Sin embargo, existe la incógnita de si este proceso, desaparecerá una vez haya terminado el confinamiento, o sí, por el contrario, continuará tan vigente como hasta ahora.

Ante el escenario de una “nueva normalidad” donde las medidas de prevención permanecen presentes. El comercio electrónico pareciera crecer continuamente. Pues la sociedad ha adoptado nuevos hábitos de consumo, en los que las compras por internet son cada vez más prioritarias por encima de un comercio físico.

 

Crecimiento del e-commerce ante el confinamiento

Tras la propagación del covid-19 en todo el mundo y las medidas necesarias para su prevención, el comercio electrónico comenzó a ganar un terreno impresionante en la sociedad. Las compras a través de Internet se triplicaron en tan solo unos meses. Esto, principalmente por la necesidad de las pequeñas y medianas industrias de mantenerse en el mercado pese a la recesión.

Toda esta situación, llevó a las empresas a considerar dos escenarios, adaptarse o quedar en el olvido. El comercio electrónico pasó a ser una prioridad dentro de cualquier empresa que deseara seguir operando en medio de la pandemia.

La adaptación a estos cambios ha representado un desafío por todo el proceso que implica trabajar desde el mundo online. Sin embargo, la necesidad de mantenerse ha sido el motor que mueve a todas las empresas grandes, medianas o pequeñas dentro de este nuevo proceso de cambio.

Estadística: Variación de los ingresos por ventas de comercio electrónico durante el brote de COVID-19 en algunos países de América Latina en abril de 2020 | Statista
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¿Qué pasará después?

El comercio electrónico ha llegado para quedarse. Si bien en diferentes países del mundo los negocios físicos comienzan a reabrir sus puertas y ofrecer sus servicios o productos a los clientes, la comodidad, seguridad y posibilidad que ofrece el e-commerce a los clientes, hace que se vea como una oportunidad de comprar mucho más atractiva.

En el caso de nuevos emprendimientos, la posibilidad de iniciar desde el e-commerce facilitaría muchos aspectos relacionados con procesos como publicidad o alcance, y a un costo de inversión mucho menor. Lo que representa una ventaja indiscutible.

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Aspectos a considerar en una tienda online

Aunque pasar al e-commerce representa un verdadero desafío existen elementos que ayudan a facilitar el proceso si son planteados desde el inicio. Estos son:

  • Objetivos: Destacar qué hacer, cómo hacerlo y para quién hacerlo son detalles importantes dentro de cualquier organización. Por lo que definir estos aspectos es crucial.
  • Confianza: Uno de los mayores logros de las empresas en Internet es generar la confianza de sus clientes desde el inicio. De esta manera se creará una adecuada reputación. Para lograrlo hay aspectos clave que incluyen la experiencia del usuario durante el proceso de compra, la atención al cliente y los tiempos de entrega (la tolerancia del usuario es de 1 a 2 días máximo).
  • Estrategias: mantener estrategias de marketing digital adecuadas a la tienda les hará permanecer a la vanguardia. Aquí se hace indispensable conocer las tendencias de compra del público objetivo y contar con sólido plan de contenidos y redes sociales.
  • Experiencia del usuario: Enfocar en ofrecer una experiencia adecuada para el usuario es indispensable. Así, se garantizará la fidelidad de los clientes y la atracción de nuevos prospectos. Para conocer la experiencia del usuario es indispensable medir, porque establecer un canal de ventas digitales sin mediciones y datos es ir a ciegas
  • Optimización: los canales de e-commerce son como seres vivos que evolucionan con los consumidores, sus hábitos y preferencias siempre cambiantes, perneados por los avances tecnológicos y el contexto (para muestra un botón: la pandemia del covid-19). Aquí siempre es útil echar mano de tecnologías precisas, como la que ofrecen algoritmos de inteligencia artificial.

 

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